Pocas cosas son tan enriquecedoras para explicar un tema de historia o arte como una visita a un museo o sitio arqueológico.
Lamentablemente, esas visitas pueden ser complicadas si se deben planear por ejemplo, con grupos de escolares, ya que hay que pedir los necesarios permisos, tanto al museo a visitar como a los tutores de los alumnos, contratar un autobús, verificar los tiempos, recorrer el museo en medio día para estar a tiempo de vuelta, etc.
Afortunadamente, en la actualidad contamos con la tecnología que nos permite visitar virtualmente muchos sitios. Y aunque admitiendo que no es lo mismo que la experiencia real, se trata de una herramienta de enseñanza muy valiosa e incluso divertida. Posibilitando además mostrar a los alumnos, lugares a los que sería impensable llevar en un autobús escolar como, el Museo del Louvre en París o las pirámides de Egipto.